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Hola, soy María, y hoy voy a compartir contigo la auténtica receta del salmorejo cordobés. Este plato refrescante y delicioso es una joya de la gastronomía española, y estoy emocionada de mostrarte cómo prepararlo paso a paso para que te quede perfecto. El salmorejo no solo es una delicia para el paladar, sino también una receta llena de historia y tradición.
Originario de Córdoba, Andalucía, el salmorejo se ha convertido en un favorito en toda España, especialmente durante los calurosos meses de verano. A diferencia de su primo, el gazpacho, el salmorejo tiene una textura más cremosa y un sabor más intenso debido a la mayor cantidad de pan que se utiliza en su elaboración.
Ingredientes del salmorejo
Antes de sumergirnos en la preparación, vamos a repasar los ingredientes necesarios para hacer un auténtico salmorejo cordobés. La clave está en la calidad de los ingredientes, así que asegúrate de elegir los mejores que puedas encontrar.
- 1 kg de tomates maduros (preferiblemente tomates de pera)
- 200 g de pan rústico (del día anterior)
- 1 diente de ajo
- 150 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Para la guarnición:
- 1 huevo duro
- 50 g de jamón serrano
Estos ingredientes son suficientes para preparar 4-6 raciones de salmorejo. Ahora, vamos a ver cómo transformar estos simples ingredientes en una deliciosa crema que te transportará directamente a las calles de Córdoba.
Cómo hacer salmorejo cordobés tradicional
Preparar un salmorejo perfecto no es difícil, pero requiere atención a los detalles y un poco de paciencia. Sigue estos pasos y te aseguro que el resultado te encantará.
Paso 1: Preparar los tomates
- Lava bien los tomates y córtalos en cuartos.
- Tritúralos en un procesador de alimentos o con una batidora de mano hasta obtener un puré suave.
- Pasa el puré por un colador para eliminar las pieles y las semillas. Este paso es crucial para lograr una textura suave y sedosa.
Consejo de María: Si los tomates no están en su punto óptimo de maduración, puedes añadir una pizca de azúcar para realzar su dulzor natural.
Paso 2: Preparar el pan
- Corta el pan en trozos y remójalo en el puré de tomate durante unos 10 minutos.
- Este paso permite que el pan absorba el sabor del tomate y se ablande, facilitando la mezcla posterior.
Nota importante: El pan del día anterior funciona mejor porque está más seco y absorbe mejor los sabores.
Paso 3: Triturar y emulsionar
- Añade el diente de ajo pelado a la mezcla de tomate y pan.
- Comienza a triturar todo junto mientras vas añadiendo el aceite de oliva en un hilo fino.
- Este proceso de emulsión es crucial para lograr la textura cremosa característica del salmorejo.
- Continúa triturando hasta obtener una crema suave y homogénea.
Truco de María: Si prefieres un sabor de ajo más suave, puedes escaldar el diente de ajo en agua hirviendo durante unos segundos antes de añadirlo a la mezcla.
Paso 4: Ajustar el sabor
- Prueba la mezcla y añade sal al gusto.
- Si es necesario, ajusta la consistencia añadiendo más pan si está muy líquido o más agua si está demasiado espeso.
Recuerda que el salmorejo debe tener una consistencia cremosa pero no excesivamente espesa. Debe poder comerse con cuchara, pero no ser tan denso como un puré.
Paso 5: Enfriar y servir
- Refrigera el salmorejo durante al menos 2 horas antes de servir.
- Mientras tanto, prepara la guarnición picando finamente el huevo duro y cortando el jamón serrano en tiras finas.
El salmorejo se disfruta mejor bien frío, así que no tengas prisa por servirlo. La espera valdrá la pena, te lo aseguro.
Con qué acompañar el salmorejo cordobés
El salmorejo es delicioso por sí solo, pero la guarnición tradicional le añade textura y sabor. Aquí tienes algunas ideas para acompañarlo:
- Huevo duro picado y jamón serrano en tiras (la guarnición clásica)
- Trocitos de atún en conserva
- Dados de pepino fresco
- Aceitunas picadas
- Un chorrito extra de aceite de oliva virgen
Puedes ser creativo con los acompañamientos, pero te recomiendo probar primero la versión tradicional para apreciar su auténtico sabor.
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Preguntas frecuentes sobre el salmorejo
A lo largo de los años, he recibido muchas preguntas sobre el salmorejo. Aquí te respondo algunas de las más comunes:
¿Qué diferencia hay entre salmorejo y gazpacho?
Aunque ambos son sopas frías de tomate típicas de Andalucía, existen algunas diferencias clave:
- El salmorejo lleva más pan, lo que le da una textura más cremosa y espesa.
- El gazpacho incluye pimiento y pepino, mientras que el salmorejo no.
- El salmorejo se sirve tradicionalmente con huevo duro y jamón, mientras que el gazpacho suele servirse solo o con guarnición de verduras picadas.
¿De qué está hecho el salmorejo?
El salmorejo está hecho principalmente de tomates maduros, pan, ajo, aceite de oliva virgen extra y sal. Es una receta sencilla pero llena de sabor gracias a la calidad de sus ingredientes.
¿Qué es más sano, salmorejo o gazpacho?
Ambos son opciones saludables, ricas en vitaminas y antioxidantes gracias a los tomates. El salmorejo tiene un mayor aporte calórico debido a la mayor cantidad de pan y aceite, mientras que el gazpacho es más ligero. La elección entre uno u otro dependerá de tus preferencias y necesidades dietéticas.
¿Cuánto dura hecho el salmorejo?
El salmorejo se conserva bien en la nevera durante 2-3 días si lo guardas en un recipiente hermético. Sin embargo, te recomiendo consumirlo lo antes posible para disfrutar de su mejor sabor y textura. Recuerda siempre mantenerlo refrigerado.
Variaciones del salmorejo
Aunque la receta tradicional es deliciosa, existen algunas variaciones interesantes que podrías probar:
Salmorejo de remolacha
Añade una remolacha cocida a la mezcla para obtener un salmorejo de un hermoso color rosa y un sabor ligeramente dulce.
Salmorejo de zanahoria
Sustituye parte de los tomates por zanahorias para obtener una versión más dulce y con un bonito color naranja.
Salmorejo sin pan
Para una versión baja en carbohidratos, puedes sustituir el pan por almendras molidas. El resultado será diferente, pero igualmente delicioso.
Recuerda que estas variaciones, aunque sabrosas, se alejan de la receta tradicional del salmorejo cordobés.
Consejos para un salmorejo perfecto
Después de años preparando salmorejo, he recopilado algunos consejos que te ayudarán a conseguir el mejor resultado:
- Usa tomates muy maduros y de buena calidad. El sabor del tomate es fundamental en esta receta.
- El aceite de oliva debe ser virgen extra y de buena calidad. No escatimes en este ingrediente.
- Añade el aceite poco a poco mientras trituras para conseguir una emulsión perfecta.
- Si el salmorejo queda muy espeso, puedes añadir un poco de agua fría para ajustar la consistencia.
- Deja reposar el salmorejo en la nevera al menos un par de horas antes de servir. Esto permite que los sabores se integren mejor.
El salmorejo en la cultura española
El salmorejo no es solo una receta, es parte integral de la cultura gastronómica española, especialmente en Andalucía. En Córdoba, su ciudad de origen, el salmorejo es motivo de orgullo y se sirve en prácticamente todos los bares y restaurantes.
Durante los calurosos veranos andaluces, el salmorejo se convierte en un plato imprescindible, ofreciendo una forma refrescante y nutritiva de combatir el calor. Es común ver a los cordobeses disfrutando de un bowl de salmorejo en las terrazas, acompañado de una cerveza fría o un fino.
La popularidad del salmorejo ha traspasado fronteras, y hoy en día se puede encontrar en restaurantes españoles de todo el mundo. Sin embargo, nada se compara con disfrutar de un auténtico salmorejo cordobés en su lugar de origen.
Maridaje: qué beber con el salmorejo
El salmorejo es un plato versátil que se puede acompañar con diversas bebidas. Aquí te dejo algunas sugerencias:
- Vino blanco seco y fresco, como un Verdejo o un Albariño
- Fino o Manzanilla, vinos típicos de Andalucía que combinan perfectamente con el salmorejo
- Cerveza fría, especialmente en los días calurosos de verano
- Para los que prefieren opciones sin alcohol, una limonada casera o agua con gas con rodajas de limón son excelentes opciones
Recuerda que el mejor maridaje es siempre el que más te guste a ti. No tengas miedo de experimentar y encontrar tu combinación perfecta.
Explora en nuestros medios
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Más recetas refrescantes de sopas frías
Si te ha gustado el salmorejo y quieres explorar más opciones de sopas frías, te recomiendo probar estas recetas:
- Gazpacho andaluz tradicional
- Ajoblanco malagueño
- Vichyssoise
- Sopa de melón
Estas sopas son perfectas para los días calurosos y ofrecen una forma deliciosa y saludable de mantenerte hidratado.
Gastronomía
El salmorejo es solo una muestra de la rica gastronomía española. Cada región de España tiene sus propias especialidades culinarias que vale la pena explorar. Desde las paellas valencianas hasta las tapas vascas, pasando por los cocidos madrileños y las fabadas asturianas, la cocina española es un mundo de sabores por descubrir.
Te animo a que sigas explorando y probando nuevas recetas. La cocina es un viaje constante de descubrimiento y aprendizaje, y cada plato que preparas te acerca un poco más a la cultura y tradiciones de un lugar.
Esta imagen muestra el salmorejo cordobés servido en un bowl blanco, con su característico color naranja intenso y la guarnición de huevo duro y jamón serrano. Perfecto para compartir en Pinterest y despertar el apetito de tus seguidores.
En esta imagen se muestran los ingredientes principales del salmorejo dispuestos de forma atractiva: tomates maduros, pan rústico, ajo, aceite de oliva y la guarnición de huevo y jamón. Una imagen ideal para ilustrar la simplicidad y calidad de los ingredientes necesarios para esta receta.
ImprimirSalmorejo receta
Auténtica receta de salmorejo cordobés, una deliciosa sopa fría de tomate típica de Andalucía, España.
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocción: 0 minutos
- Tiempo total: 20 minutos (más tiempo de enfriado)
- Rendimiento: 4-6
- Categoría: Sopa fría
- Método: Sin cocción
- Cocina: Española, Andaluza
Ingredientes
- 1 kg de tomates maduros (preferiblemente tomates de pera)
- 200 g de pan rústico (del día anterior)
- 1 diente de ajo
- 150 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Para la guarnición:
- 1 huevo duro
- 50 g de jamón serrano
Instrucciones
Paso 1: Preparar los tomates
- Lava bien los tomates y córtalos en cuartos.
- Tritúralos en un procesador de alimentos o con una batidora de mano hasta obtener un puré suave.
- Pasa el puré por un colador para eliminar las pieles y las semillas. Este paso es crucial para lograr una textura suave y sedosa.
Consejo de María: Si los tomates no están en su punto óptimo de maduración, puedes añadir una pizca de azúcar para realzar su dulzor natural.
Paso 2: Preparar el pan
- Corta el pan en trozos y remójalo en el puré de tomate durante unos 10 minutos.
- Este paso permite que el pan absorba el sabor del tomate y se ablande, facilitando la mezcla posterior.
Nota importante: El pan del día anterior funciona mejor porque está más seco y absorbe mejor los sabores.
Paso 3: Triturar y emulsionar
- Añade el diente de ajo pelado a la mezcla de tomate y pan.
- Comienza a triturar todo junto mientras vas añadiendo el aceite de oliva en un hilo fino.
- Este proceso de emulsión es crucial para lograr la textura cremosa característica del salmorejo.
- Continúa triturando hasta obtener una crema suave y homogénea.
Truco de María: Si prefieres un sabor de ajo más suave, puedes escaldar el diente de ajo en agua hirviendo durante unos segundos antes de añadirlo a la mezcla.
Paso 4: Ajustar el sabor
- Prueba la mezcla y añade sal al gusto.
- Si es necesario, ajusta la consistencia añadiendo más pan si está muy líquido o más agua si está demasiado espeso.
Recuerda que el salmorejo debe tener una consistencia cremosa pero no excesivamente espesa. Debe poder comerse con cuchara, pero no ser tan denso como un puré.
Paso 5: Enfriar y servir
- Refrigera el salmorejo durante al menos 2 horas antes de servir.
- Mientras tanto, prepara la guarnición picando finamente el huevo duro y cortando el jamón serrano en tiras finas.
El salmorejo se disfruta mejor bien frío, así que no tengas prisa por servirlo. La espera valdrá la pena, te lo aseguro.
Nutrición
- Tamaño de la porción: 1 taza (250 ml)
- Calorías: Aproximadamente 200 por porción
- Azúcar: 4g
- Sodio: 300mg
- Grasas: 15g
- Grasas saturadas: 2g
- Grasas insaturadas: 13g
- Grasas trans: 0g
- Carbohidratos: 15g
- Fibra: 2g
- Proteínas: 4g
- Colesterol: 0mg
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